Un estudio conjunto entre la Universidad de Castilla-La Mancha y el SESCAM, el Servicio de Salud de esa comunidad, pone de manifiesto que aquellas personas que donan sangre consiguen que su nivel de colesterol malo se reduzca sensiblemente. Una investigación en la que se buscaba conocer si los donantes de sangre logran reducir su nivel de glucosa con este acto de altruismo. Sin embargo, los resultados preliminares ponen de manifiesto que lo que se reduce, en mayor medida, es ese nivel de colesterol malo.
Por este motivo, a las personas participantes en este estudio se les inyectó glucosa y, seguidamente, semanas después se les citó a donar sangre. Un seguimiento médico que ha desembocado en aquellos resultados preliminares. Unos resultados que sí que ponen de manifiesto que el nivel de glucosa se reduce en la sangre para aquellas personas donantes, aunque se trata de un descenso ligero.
Un estudio en el que el casi centenar de participantes contaba con un índice elevado de glucosa pero sin llegar a padecer diabetes. No obstante, del resultado preliminar, lo que ha sorprendido a los investigadores es que la donación de sangre tuviera un efecto tan beneficioso para reducir el colesterol malo.
Con todo ello, donar sangre es, de esta forma, además de un acto altruista con el que se salvan hasta tres vidas por cada donación, también, supone una terapia para reducir el azúcar y el colesterol en la sangre.