Esta semana estuvimos participando en la edición número quince de la 10 K, una de las carreras más atractivas y populares de Zaragoza. Repartimos 4 mil regalos y nos encontramos en el salón que se celebró el sábado 11 en el pabellón Príncipe Felipe con cientos de corredores, muchos de ellos donantes o con ganas de serlo. Les pedimos que disfrutaran de la carrera del día siguiente y que durante esta semana vinieran al Banco con su dorsal a donar. Nos han visitado un buen grupo de aficionados a este deporte y, sobre todo, generosos donantes. Es el caso de Elena.
Gracias por venir, ¿eres donante habitual?
Sí, dono siempre que puedo. Dos o tres veces al año.
Y además, ¿eres corredora?
Si, llevo siete años corriendo con mis hermanas, empezamos juntas.
¿Y también vienes con tu familia a donar?
Suelo venir con mi marido. Hacemos por venir los dos juntos.
¿Por qué donas?
Porque creo que nos hace falta a todos. Una necesidad siempre la podemos tener cada uno de nosotros.
¿Eres enfermera?
Sí.
¿Dónde trabajas?
Trabajo en el Hospital Provincial.
¿Y ves esa necesidad en primera línea?
Sí, sí. No se hacen tantas intervenciones como en otros sitios, pero sí se trabaja sobre todo en ginecología o en traumatología.
Y la sangre no se fabrica…
Claro, no se puede crear de la nada. Solo depende de la solidaridad de las personas.
¿Y sigue siendo la mejor medicina posible?
Sin duda. Es medicina natural y solidaria. Especialmente necesaria.
¿Y qué relación tienes con la salud y el deporte?
Pues empezamos a correr por hacer algo juntas como hermanas. Y también es verdad que nuestra salud ha mejorado. Tenemos mejor estado físico, más capacidad pulmonar. Y sobre todo lo pasamos bien.
¿Y donar también es sano?
Sí, te sientes muy bien. Es una manera excelente de aumentar la salud emocional.