Durante estos días de verano en el Banco de Sangre y Tejidos estamos sorteando entre nuestros donantes bonos para refrescarse en las piscinas municipales de Zaragoza. Es la segunda edición de la campaña #piscinaydonacion. Sabemos perfectamente que solo es un detalle. El mejor regalo es, sin lugar a dudas, tener la sensación cierta de estar salvando vidas con un gesto sencillo y pasar una experiencia personal impagable que te alegra el día. Entre los muchos donantes que han pasado durante estas semanas (y que ha recibido en el sorteo el regalo de un bono de diez entradas para piscinas) está Carlos Berbegal.
¿Cuántos años tienes, Carlos? 54
¿A qué te dedicas? Soy funcionario del Ayuntamiento.
¿Familia? Estoy casado, no tengo hijos.
¿Cuánto hace que eres donante? Buff… no lo sé, ya… veintitantos años.
Y veintitantos años… ¿Para qué, por qué, Carlos? A ver. Es algo que debe hacerse. Haces bien a alguien y no cuesta nada. A mí no me cuesta nada donar sangre. Venir cada tres meses solo me obliga a coger el coche, venir aquí y nada más.
¿Vienes cada tres meses? Si, cada tres meses.
¿Lo tienes marcado en tu agenda? Si, sí. Yo me apunto el día que dono y el día que tengo que volver.
¿Tienes clara la percepción de que ayudas a las personas? Sí. Lo tengo muy claro. Conozco gente a la que le ha hecho falta. El 0 es un grupo que no tiene todo el mundo, además. Yo soy 0 positivo.
¿Además eres donante por aféresis? Si. Hago una aféresis cada seis meses y en medio una donación de sangre total.
Gracias, Carlos. Muchísimas gracias a vosotros.